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El turismo religioso es una excelente forma de conocer la cultura, las tradiciones y las manifestaciones religiosas de la humanidad.

 

[Cristo Roto, San José de Gracia, Aguascalientes.] 

Cada año, más de 300 millones de personas viajan por concepto de turismo religioso a nivel internacional, lo que representa una derrama económica superior a los 18 mil millones de dólares para los destinos que visitan.

 

El motor principal del desplazamiento de tantos visitantes en el turismo religioso son la fe y el culto a una deidad superior, acorde con las creencias y tradiciones locales. Millones de viajeros acuden a casi cualquier rincón del planeta a visitar santuarios, lugares sagrados, tumbas de santos o a realizar alguna peregrinación.

 

Cuevas, grutas y cenotes, sagrados para la cultura maya.

 

Muchas de las personas que hacen estos viajes o excursiones tienen motivos profundamente arraigados en su fe, para cumplir un compromiso o por que ofrecieron un “sacrificio” a Dios, entre otros; aunque también es frecuente que lo hagan con fines culturales o simplemente para conocer.

 

Se calcula que en México más de 30 millones de personas realizan turismo religioso anualmente.  Nuestro país destaca en el ámbito internacional por la diversidad cultural y las extraordinarias manifestaciones religiosas y tradiciones que tenemos prácticamente en cada rincón de México.

 

 

La Catrina, Personaje central en la celebración del Festival Cultural de las Calaveras, Aguascalientes.

 

 

 

Un ejemplo lo constituyen las diversas manifestaciones culturales y religiosas en la celebración del Día de Muertos, que en cada región de nuestro país tiene sus propias tradiciones y formas locales de celebrarlo.

 

México se encuentra entre los primeros 10 países con mayor turismo religioso en el mundo, subsector que anualmente moviliza a 330 millones de personas hacia sitios que son patrimonio espiritual y cultural del planeta, lo que representa 20% del flujo de paseantes internacional, de acuerdo con la Organización Mundial de Turismo (OMT).

 

Entre los lugares más visitados con este motivo en nuestro país se encuentran: Taxco, Guerrero, San Luis Potosí, Querétaro, Oaxaca y San Miguel de Allende, Guanajuato, en donde se realizan procesiones de fama internacional durante la Semana Santa.

 

Mientras que en la sierra Tarahumara, Chihuahua; Pátzcuaro, Michoacán, y Maní, Yucatán, se llevan a cabo festividades de sincretismo religioso católico e indígena que son de gran atractivo para los turistas. A ellos se suman los Viacrucis en un sinnúmero de localidades de todo el país, como la de la alcaldía de Iztapalapa, en la Ciudad de México.

 

 

Millones de peregrinos en la Basílica de Guadalupe.

 

Destacan particularmente las visitas a la Basílica de Guadalupe, San Juan de los Lagos, El Santuario del Santo Niño de Atocha, El Cristo Rey en Guanajuato y El Templo del Santo Señor de Chalma, que son los cinco santuarios con mayor número de visitantes nacionales y extranjeros.

 

 

 

Recordemos que la Basílica de Guadalupe es el principal Santuario Católico de Latinoamérica y el segundo más visitado del mundo, solo detrás de la Basílica de San Pedro en Roma; y que concentra más de 15 millones de fieles cada año.

 

Hay muchos más santuarios religiosos en México que son dignos de visitar y que podrían tener cabida en esta lista, incluidos aquellos que son visitados por un culto religioso basado en nuestros antepasados y  que actualmente son sitios arqueológicos, tal es el caso de Teotihuacán en el Estado de México, Tajín en Veracruz y Chichen Itzá en Yucatán. Lugares recreativos y reactivados cada año por el turismo religioso.

 

 

Estamos por iniciar una de las temporadas más importantes para el Turismo Religioso, con la celebración de las fiestas de la Vírgen de Guadalupe, con millones de visitantes a su santuario, y que lleva hasta la celebración de la Semana Santa en México.

 

Es un buen momento para planear cómo podemos aprovechar esta temporada y ofrecer servicios adecuados a este segmento del turismo, que tiene requerimientos diferentes a otros tipos de turistas.

 

Amigo hotelero, te recomendamos prepararte y seguir estos consejos, sencillos pero que sabemos te serán de ayuda en este tema:

 

Identifica manifestaciones religioso-culturales cerca de tu ubicación.

 

Ubica templos, vestigios y otros hitos que puedan ser motivo de visita para los turistas.

 

Diseña productos y servicios para este segmento, por ejemplo, comparte los horarios de los eventos religiosos y culturales  y ofrece un servicio de traslado de tu hotel al lugar de los mismos.

 

Conoce muy bien cuáles son las manifestaciones culturales y religiosas de las comunidades cercanas a tu localidad.

 

Promueve siempre el respeto al patrimonio cultural y a las tradiciones locales.

 

Apoya, en la medida de tus posibilidades, el rescate y conservación de las expresiones culturales y religiosas de tu ciudad, no permitas que se caricaturicen o se desvirtúen.

 

¿Estás aprovechando este tipo de turismo para tu empresa?

 

Coméntanos cómo lo estás haciendo.

 

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